HISTORIA. CALLE MAYOR

Respuesta a Izquierda Unida
Noviembre de 1996

A menudo se dice que la naturaleza es sabia. Por mecanismos misteriosos reparte justicia entre sus seres, compensando las carencias físicas que cada uno pueda tener con virtudes exclusivas que equilibran sus desventajas con el resto del mundo. Así, las plantas no pueden moverse, pero tampoco lo necesitan porque son capaces de sintetizar su propio alimento; otro ejemplo podría ser el pingüino, tan torpe para moverse por la tierra pero con tan buenas aptitudes para desenvolverse en el agua. También se observa que cuando cualquier animal, por algún desgraciado motivo, pierde uno de sus sentidos, el resto se desarrolla excepcionalmente consiguiendo compensar en cierta medida la falta. No es extraño, por ejemplo, que las personas ciegas tengan un excelente olfato u oído. Lo que sí se ha convertido en un misterio para nosotros es adivinar de qué facultad sobrenatural estará dotado el señor Tomás Alonso para acusar tan grande falta de los sentidos educacional y la dignidad propia, habiéndose puesto en ridículo delante de tanta gente con su artículo en esta revista del mes pasado.

Pasaríamos por alto esa pila de despropósitos y haríamos oídos sordos de palabras necias (otra vez estamos con los sentidos y la justa naturaleza, que nos posibilita ignorar lo que entra por nuetra vista y audición cuando no merece crédito), pero no nos queda otro remedio que contestar a ciertas falsedades y verdades a medias que conviene esclarecer.

Como cuando se dice que tenemos un presupuesto de 2.690.000 pesetas. Ni en nuestros más felices sueños hemos dispuesto de tanto dinero. Señor Tomás Alonso, aclare mejor las cosas; esa cantidad era la subvención que pedíamos al Ayuntamiento en el proyecto de actividades para 1996 desglosada de la siguiente forma. 70.000 pesetas al mes que se dedicarían, en parte para la retribución del director, y el resto para el mantenimiento general de la Orquesta, como reparaciones y renovación del material y la realización y mejora de la labor que actualmente desempeñamos; nos referíamos a la actividad concertística en nuestra localidad, que podría extenderse a otras en las que fuera interesante promocionar nuestro pueblo y nuestra Orquesta. El resto del dinero que figuraba en el proyecto estaba destinado a diversas actividades concretas, claramente diferenciadas y con un presupuesto para cada una de ellas, realizables o no, en función de recibir la financiación necesaria. Nos referimos a eventos como la organización del homenaje a Manuel de Falla que actualmente se desarrolla gracias a la colaboración económica de la Junta de Castilla y León y a los fondos propios de la Orquesta (el Ayuntamiento de Tudela finalmente ha prometido ayudarnos), con gran beneficio para el pueblo (y no para nosotros) que está disfrutando de buenos conciertos. Otros proyectos eran la realización de intercambios con otras orquestas, la grabación de un CD, etc. Actualmente contamos con una subvención del Ayuntamiento que asciende a 28.333 pesetas al mes y nos las arreglamos como podemos para salir adelante. En ningún momento consta en el proyecto la amenaza de buscarse otro mecenas. El cálculo presupuestario sí se corresponde a las necesidades reales.

Se nos acusa, además, de tener ánimo de lucro. A esto tenemos que decir que, legalmente, estamos reconocidos como asociación sin ánimo de lucro. Cobrar en concepto de gastos por algunas actuaciones no significa que nos enriquezamos con ello puesto que, cuando existen excedentes, no repartimos beneficios, sino que lo empleamos en obras culturales. Eso es lo que significa "sin ánimo de lucro", por si alguien no lo tiene claro.

También se nos imputa el haber recibido entre los años 1992 y 1995 la cantidad de 4.210.894 pesetas. Que no nos metan a todos en el mismo saco; entre las fechas reseñadas se gastó ese dinero para financiar la Escuela Municipal de Música, la Escolanía, La Coral y la Orquesta de Pulso y Púa en concepto de sueldo del profesor, que entonces era una empleado del Ayuntamiento y hasta que no dejó de serlo, la Orquesta no ha tenido ni un duro de subvención. Es decir, durante más de diez años hemos tenido un profesor que nos ha enseñado y que ha sido pagado por el Ayuntamiento; indirectamente nos hemos beneficiado de ese dinero, pero no ha existido subvención alguna para la Orquesta hasta 1995. En ese año, Jesús Gutiérrez dejó de ser un asalariado del Ayuntamiento y se concedió a la Orquesta de Pulso y Púa una cantidad hasta las elecciones municipales, tras las que cambió el gobierno municipal. En el desorden del cambio expiró nuestra subvención y pedimos al nuevo gobierno 150.000 pesetas para los cuatro últimos meses del año, hasta que planificaran los presupuestos siguientes. La concejalía de cultura accedió a concedernos la petición, pero a condición de que realizásemos, antes de final de año, tres actuaciones para que el Ayuntamiento pudiera justificar ese dinero.

Igualmente se nos cargan a nosotros los gastos de los pianos, instrumentos que pertenecen al municipio y al pueblo de Tudela y que ahora disfrutan los alumnos de la Escuela Municipal de Música; pero lo más importante, la Orquesta de Pulso y Púa, precisamente por lo que su propio nombre indica (pulso y púa) no utiliza para nada los pianos, porque no los necesita. Así que no nos carguen a nosotros gastos de otros, que cualquier día nos hacen responsables de la recogida de basuras.

Sobre la maqueta musical "sin ningún futuro" cuyo resultado tan poco ha gustado a don Tomás, tenemos que aclarar que fue totalmente financiada por la propia Orquesta, para lo que tuvimos que hacer de todo, desde pedir la voluntad en algún concierto hasta vender bocadillos. Cuando la cinta ya estaba editada, el ayuntamiento compró ejemplares de la misma por valor de 250.000 pesetas; otra subvención que no ha existido. Para nosotros haber conseguido editar este trabajo nos llena de orgullo, pues supone la culminación de nuestros esfuerzos, la ilusión de un grupo de jóvenes que pusimos todo nuestro empeño en hacer algo para plasmar la labor realizada durante años, y la alegría de ver, con la cinta en el mercado, que hay cosas en la vida por las que merece la pena sacrificarse, sacarle a nuestra existencia algo más que pasar las horas muertas en el bar jugando a las cartas.

Sobre la calidad sonora está de más hablar porque es lo de menos; fue grabada por jóvenes aficionados con cuatro duros y en penosas condiciones. De haber contado con un apoyo de dos millones de pesetas, habríamos sacado un CD con los medios técnicos más avanzados y el sonido más puntero. Lo del "futuro" poco importa, porque tiene presente, porque ha figurado y ha sido bien acogida en el festival de música de pulso y púa más importante del mundo y porque, seguramente, a raíz de este festival, haya viajado a tierras rusas, alemanas, búlgaras y quién sabe a qué más países. Todo esto supone para Tudela, no el "capricho de unos niños nacidos en sábanas blancas". Seguramente todos hayamos nacido en un hospital. No sabemos si las sábanas eran verdes o blancas con la palabra Insalud; lo que sí sabemos es cuáles han sido nuestras cunas; las de Tudela, las mismas que las de la gente que da vida al pueblo, las de nuestros vecinos y las de muchos de los que ahora están leyendo Calle Mayor. Somos chavales de aquí, no somos extraterrestres.

Si echamos la vista atrás y hacemos balance teniendo en cuenta lo que técnicamente es una subvención (a saber, una cantidad de dinero que se concede a una asociación a fondo perdido para realizar cualquier labor social o cultural con la única condición de justiticar sus gastos) podemos entender que el sueldo de un empleado del Ayuntamiento -como fue nuestro director durante años- no es una subvención; y que si se nos exige realizar un número determinado de actuaciones a cambio de una suma de dinero, tampoco estamos siendo subvencionados (¿o es que se subvenciona a las orquestas que vienen en las fiestas a hacer las verbenas?). Luego, tras este razonamiento, llegamos a la conclusión de que la única ayuda que podemos estimar como subvención teórica y práctica, fue la que recibimos durante unos pocos meses de 1995; desde que Jesús Gutiérez dejó de trabajar para el Ayuntamiento hasta las elecciones municipales. El próximo año 1997 cumpliremos quince años de existencia durante los cuales sólo hemos sido subvencionados unos pocos meses. Y todavía dicen que somos un grupo de privilegio que, según Tomás Alonso, IU intenta eliminar: palabra que por sí sola ya mete miedo. ¿Esa es la intención de IU? ¿La de eliminar la Orquesta?

Algo en lo que insiste mucho en el desacertado artículo al que hacemos referencia, es en que no somos un grupo municipal. Ignoramos si existe una normativa legal al respecto, pero la noticia que tenemos desde que un día hace años, cuando éramos pequeña rondalla y tocamos en la Casa Consistorial para el Alcalde y otras personalidades, es que somos un grupo municipal. Además, nos hallamos en poder de un documento que corresponde a una sesión plenaria del 28 de enero de 1991, en el que se reconoce el valor cultural de nuestras inicativas y "creyendo interpretar el buen sentir de este pueblo y corporación", Dustán Lorenzo Sacaluga (secretario), certifica (trancribimos literalmente).
"1.- Que aunque de hecho lo vengan usando con todo agrado por parte de este Ayuntamiento, queriendo dar carácter oficial a tal uso, se reconozca expresamente a dichos colectivos artísticos con carácter honorífico, el derecho a usar el nombre de este municipio, pudiendo denominarse por consiguiente, "Coral Municipal de Tudela de Duero", e igualmente, la escolanía y Orquesta de Pulso y Púa".

Sobre los insultos dirigidos hacia nuestras madres y hacia nosotros mismos, no vamos a comentar nada porque no queremos caer tan bajo.

En el mismo número de Calle Mayor, y tras el apasionado preludio de Tomás Alonso, aparece una carta firmada por Félix Sanz, coordinador local de IU, que explica con coherencia las líneas política de su partido en materia cultural, y llegamos a una conclusión: existe cierta confusión entre los representantes de IU o las cosas son mucho más complejas de lo que explica Félix Sanz, porque para nada se corresponden con las indicaciones de su artículo con lo desmedido del de Tomás Alonso.

Sólo contestaremos a un par de ideas de Félix Sanz: asegura que tras nuestras frases se esconden frustraciones personales: si lo pensamos un poco y reparamos en que la persona de mayor edad de la Orquesta tiene veintitrés años de edad, podemos deducir que aún no hemos tenido tiempo de sufrir frustraciones personales.

El otro tema al que hacemos referencia es al programa electoral que según él mismo "fue realizado con la colaboración de todas las asociaciones que quisieron colaborar". A nuestra asociación nadie le pidió opinión ni colaboraciones para elaborar este programa.

Finalmente, Félix Sanz deja la mano tendida con el fin de abrir un diálogo que busque las soluciones necesarias para que la Orquesta pueda seguir funcionando con normalidad. Nos parece muy bien, y añadimos que, antes de la aparición de los dos artículos mencionados, ya habíamos intentado abrir el diálogo con IU, pero nuestros llamamientos no fueron contestados. Esperamos que ahora la cosa cambie.

Para terminar, aclararemos algunas cosas más. La Orquesta de Pulso y Púa es una asociación apolítica, nuestro objetivo es ocuparnos de lo que tenga relación con la música. Creemos que no hacemos daño a nadie reuniéndonos a tocar nuestros instrumentos, y siempre que podemos, mostrar los frutos de nuestro trabajo; es más, seguro que hay gente que disfruta oyéndonos.

Nuestro director, Jesús Guitérez Lebrero, es un profesional que trabaja para nosotros; se dedica a la parte técnica y musical del grupo, pero (que nadie se equivoce), los aspectos de gestión, representación y toma de decisiones en aspectos ajenos al tema musical son tratados por la asamblea general de la asociación, presidida por una junta directiva elegida todos los años democráticamente por sufragio de los asociados. El director no tiene voz ni voto en la asamblea, es más, en la mayoría de las reuniones no se permite su asistencia.

Tanto este artículo como el aparecido en el mes de junio están respaldados por toda la Orquesta de Pulso y Púa. Les invitamos a repasar la polémica trilogía con lupa y no encontrarán insultos por nuestra parte. Lamentamos habernos extendido tanto, pero era necesario.

©2004 Orquesta de Pulso y Púa de Tudela de Duero